Los materiales que conforman el sustrato rocoso de la zona corresponden, fundamentalmente, con pizarras, las cuales toman el nombre de Luarca por ser esta población dónde fueron descritas inicialmente y debido a los buenos afloramientos que constituyen los acantilados costeros.
En una publicación de 1882 de Charles Barrois, un geólogo francés, menciona y analiza en su estudio "Recherches Sur les terrainsanciens des Asturies et de la Galice" (Investigación sobre las tierras antiguas de Asturias y Galicia) los que él denomina como "Schistes de Luarca", traducido posteriormente como Pizarras de Luarca. Esta denominación, en sentido amplio, es usada hasta día de hoy.
La serie Pizarras de Luarca es reconocida, y recibe este mismo nombre, en territorios del Occidente de Asturias, Lugo, Orense, León y Zamora. Está formada,esencialmente, por pizarras gris oscuro a negras, con abundante pirita, que en origen corresponden con un depósito sedimentario marino relativamente profundo. Integrando un miembro medio cuarcítico, su espesor global es próximo a los 600 m en esta zona y está datada como Ordovícico Medio (aproximadamente 470 millones de años).